La escudería Red Bull Racing ha anunciado este viernes la ampliación de su contrato de colaboración con el fabricante de motores Renault. A pesar de las continuas quejas de falta de potencia emitidas esta temporada por el equipo austríaco, los coches azules continuarán montando los mismos propulsores durante dos años más, hasta 2012.
Red Bull ha confirmado también que el nuevo acuerdo incluye una mayor visibilidad de la marca Renault en sus monoplazas. Ya desde el GP de Brasil de este fin de semana, los logotipos de los franceses aparecerán en el morro de los dos coches y en los cascos de Sebastian Vettel y Mark Webber.