La introducción del KERS de cara a la temporada 2009 supuso grandes exigencias para los pilotos que tuvieron que perder peso para poder acomodar el pesado sistema en sus monoplazas sin que el peso del conjunto superara el mínimo fijado por la reglamentación.
A pesar de que el peso mínimo de coche y piloto será 640 kg. en 2011 (entonces era 605 kg.), el margen con el que cuenten los equipos para distribuir el lastre -usado para llegar a ese mínimo- sigue siendo clave para equilibrar los monoplazas.