Felipe Massa ha admitido haber tenido una mala temporada en 2010, después de no haber podido encontrar el ritmo con los neumáticos Bridgestone y de haber sido superado por su nuevo compañero de equipo en Ferrari. Pero el brasileño no se ha desanimado y espera volver a la lucha en 2011.
"El año fue malo para mí, un año muy difícil. No tengo miedo ni estoy avergonzado de hablar de ello. Cada vez que hago una mala temporada, la siguiente es buena," aseguró.