El propietario de Red Bull, Dietrich Mateschitz, ha asegurado que la escudería campeona del mundo no perderá más miembros en favor de otros equipos de la categoría. Las afirmaciones se producen poco después de que Neil Martin, antiguo ingeniero de la escudería austríaca, fuese nombrado jefe de investigación de operaciones de la escudería italiana Ferrari.
El empresario austríaco de origen croata pronunció un rotundo "no" cuando se le preguntó si la salida de Martin sería la primera de muchas otras. Mateschitz se defendió afirmando, en declaraciones al diario alemán Bild, que "hemos prolongado recientemente los contratos de nuestros cincuenta miembros más importantes."