Tras el escándalo del crashgate en el que se vio envuelta la escudería Renault, el francés Eric Boullier fue designado como nuevo jefe de escudería por los nuevos propietarios del equipo, Genii Capital, y retendrá su puesto tras la llegada del Grupo Lotus.
Recordando su llegada al equipo hace ya un año, el francés ha declarado a autohebdo.fr:
"Tenía en mente el fantasma de mi predecesor. Me deshice de todo lo que tenía que ver con él. Cambié mi oficina, el estilo de administración. La única opción era borrarlo todo o hacerlo diferente, excepto a mí mismo. No había nada que perder."
Boullier se muestra contento con seguir estando al frente del equipo de Enstone, y espera que el nuevo Lotus Renault GP sea capaz de ganar carreras: