El jefe de equipo de McLaren, Martin whitmarsh, declaró que han hecho cambios drásticos en el nuevo MP4/26 en busca de solucionar los problemas planteados en pretemporada. El británico se mostró claro y reveló que el objetivo del equipo en la primera carrera es ser un segundo más rapido.
Whitmarsh dio su opinión sobre el rendimiento del monoplaza: "No estoy satisfecho con la posición en la que nos encontramos en cuanto a fiabilidad y rendimiento. Durante estos días hemos realizado cambios en el coche y ahora comprobaremos en Australia si funcionan. Corremos cierto riesgo porque llegamos a Melbourne sin saber como se comportará el coche, pero espero que este riesgo merezca la pena".