El presidente de la FIA, Jean Todt, defendió su postura acerca de la introducción de los nuevos motores de cuatro cilindros y 1'6 litros que se pretende llevar a cabo en un futuro no muy lejano. El francés desestima así las declaraciones de Bernie Ecclestone, quien se ha mostrado en desacuerdo con dicha propuesta, alegando que la pérdida del rugido de los V8 sería perjudicial para este deporte.
Sin embargo, Todt considera que la Fórmula 1 debe apostar por el cambio, ante la necesidad de volverse más ecológica: "Ya he escuchado hablar sobre el sonido, pero esto es evolución", argumenta en declaraciones al diario australiano Sydney Morning Herald.