A Sebastian Vettel no le gusta nada llamar a sus monoplazas por las siglas oficiales (RB7 esta temporada), así que todos los años elige un sugerente nombre de chica con el que bautizar a su nuevo coche. Para esta temporada se ha decantado por 'Kinky Kylie', que viene a ser algo así como 'Pervertida Kylie'.
Y es que iniciándose la temporada 2011 en Melbourne, el piloto de Red Bull ha querido rendir su pequeño homenaje a la famosa cantante australiana Kylie Minogue, de la que dice que tiene "un trasero apetitoso, es suave y bonito de ver".