Sebastian Vettel se proclamó vencedor del Gran Premio de Australia celebrado este domingo en el circuito de Albert Park, Melbourne. El alemán de Red Bull, que partía desde la pole, no vio amenazada su primera posición en ninguna fase de la carrera, confirmando el potencial del equipo austriaco.
Sin embargo, Vettel no ha querido regodearse en la victoria y en la misma rueda de prensa oficial de la FIA pidió a su equipo no caer en la euforia desmedida. Además, el piloto de Red Bull negó que su undécima victoria en la Fórmula Uno fuese fácil, al mismo tiempo que apuntaba a su buena salida como aspecto fundamental.
"No fue una carrera fácil", declaró. "La salida fue crucial. Tuve un buen comienzo pero no supe si era suficiente hasta que vi a Lewis Hamilton y Mark Webber luchando por la posición. En el primer 'stint' intenté mantener la diferencia y después en alguna fase llegué a un momento tenso al ver algo de degradación en las ruedas".
"Lewis me cogió y entramos (a boxes). No podría haber hecho más vueltas y después de mi parada fue fundamental adelantar a Jenson Button, lo cual pude hacer inmediatamente, así que fue muy, muy importante. Después de eso, en la segunda parte de la carrera no supe lo que estaba sucediendo detrás de Lewis, y con él disminuyendo la presión pude controlar la situación un poco mejor".
Es un año largo y pueden suceder muchas cosas
"Intenté contralar (la euforia) diciendo al equipo que tenemos que mantener nuestros pies en el suelo", explicó Vettel. "Hemos conseguido muchos puntos que es muy importante y disfrutamos de nosotros mismos, lo cual es aún más importante. Este es un año largo y pueden suceder muchas cosas. Hay muchas cosas que aprender de hoy y necesitamos echar otro vistazo a la carrera".
El joven alemán tiene claro quiénes serán los rivales: "Los chicos que están sentados junto a mí (Hamilton y Vitaly Petrov), más Ferrari que es siempre muy fuerte, Mercedes, que no tuvo un gran inicio, pero volverán más que el pasado año".
"Estará todo muy reñido pero es importante acabar, así que una gran, gran felicitación a la gente que está apoyando en la fábrica. El coche fue rápido pero también fiable y esa es la clave", agregó Vettel.
En cuanto a la carrera desde un punto de vista más personal comentó: "Es la primera vez que terminado el Gran Premio de Australia así que también estoy muy, muy feliz".
Por último, el defensor de la corona mundial de pilotos, quiso alabar tanto el trabajo de Pirelli como la nueva normativa de la FIA: "Tenemos que dar la enhorabuena a Pirelli. Después de los test todos estábamos un poco asustados y vinimos aquí y al final no vimos tantas paradas como esperábamos y en general fue una carrera tranquila".
"La curva 1 (de Albert Park) no es el mejor sitio para adelantar del año, pero ayuda a acercarse. Así que hasta ahora (el alerón trasero móvil) funcionó como se esperaba y únicamente puedo juzgar lo que ha sucedido conmigo, no detrás".