Siguen sucediéndose las opiniones sobre la decisión toma por el Consejo Mundial de la FIA de disputar el Gran Premio de Baréin el 30 de octubre de este año. La inmensa mayoría de ellas son contrarias, pero también las hay favorables, como la de Bernie Ecclestone.
Pero a pesar del apoyo, el británico no vaciló a la hora de señalar como único responsable de la decisión a la FIA, a sabiendas de que el calendario de la competición es responsabilidad de la FOM aún cuando es la federación y su Consejo Mundial los encargados de aprobarlo.
"La verdad del asunto es que esto fue votado por la FIA, a través del Consejo Mundial, eso es todo", dijo el jefe supremo de la Fórmula Uno a la agencia Press Association. "La FIA envió a gente allí (el presidente de la federación española, Carlos Gracia, entre ellos) para comprobar la situación, ellos regresaron e informaron de que todo estaba bien".
"Son circunstancias excepcionales"
Sobre las reticencias de los equipos representados por la FOTA, Bernie comentó: "Es obvio que todo el mundo necesitará sentirse a salvo cuando lleguemos allí. Al final tendremos que esperar y ver lo que ocurre en Baréin. Si hay paz y no hay problemas, entonces supongo que los equipos estarán de acuerdo".
Además de la situación convulsa que vive el país árabe y lo poco ético que puede resultar llevar algo tan trivial como una prueba automovilística, a los equipos también les molesta la consecuencia colateral que esta decisión tendrá: la extensión del Mundial de 2011 hasta diciembre.
Ecclestone es consciente del perjuicio que esto supone, pero tiene claro que es la única opción: "Por supuesto que ellos preferirían no correr en diciembre, pero se trata de circunstancias excepcionales".