Este nuevo distintivo visual, se suma al que han llevado en 2007 los compuestos de goma más blandos en cada Gran Premio y que se seguirá manteniendo en 2008.
Esta medida ha sido introducida a petición de los equipos y con el beneplácito de la FIA, con el objetivo de seguir mejorando el espectáculo y propiciando que el público pueda distinguir perfectamente cuando los monoplazas montan gomas de mojado o de condiciones extremas.