Una vez más, Alonso ha tenido que dedicar más tiempo de sus declaraciones a hablar de su situación en Renault y sus expectativas, que a analizar la carrera en sí. El asturiano vuelve a demostrar su pesimismo y que tiene los pies en la tierra, aunque no se olvida de lanzar dardos envenenados a su antiguo equipo: "Toca sufrir, pero menos que el año pasado", ha declarado en alusión a lo que ya todos sabemos.
"Yo no espero ningún resultado este año, no es que cuando llegue Barcelona espere estar en el podio y cuando lleguemos a Hungría espere ganar la carrera. Cuando llegue a Barcelona vamos a seguir intentando entrar en la crono 3 y al llegar a la última carrera lo mismo. Los resultados van a ser esos y la moral no va a cambiar mucho, vamos a intentar disfrutar de las carreras, hacer el mejor trabajo posible y poco a poco si podemos acercarnos a los de adelante tendremos carreras mas divertidas y si no tendremos carreras igualmente divertidas luchando con los de dos o tres posiciones más detrás".