Para esta temporada, Pirelli ya comentó antes del primer Gran Premio que los neumáticos de este año iban a estar más igualados entre ellos, ya que los habían reblandecido un poco. Gracias a eso, el espectáculo en cada carrera aumentaría, ya que los equipos deberían planear bien las estrategias y estar siempre alerta sobre la degradación de las ruedas. Uno de los pilotos que estuvieron de acuerdo con este cambio fue Michael Schumacher, quien mostró su satisfacción durante los test de pretemporada.
Sin embargo, tras el Gran Premio de Baréin, el piloto alemán criticó a Pirelli al afirmar que las ruedas de este año no permiten que los pilotos puedan empujar al límite sus monoplazas y "parece que conduzcamos detrás del coche de seguridad".
Opiniones diversas
Por su parte, Norbert Haug, jefe del equipo Mercedes AMG, ha comentado que no está de acuerdo con las palabras de su piloto alemán, pero insiste en que comprende las críticas que pueda haber lanzado Schumacher. Haug mostró su desacuerdo con el veterano piloto porque asegura que la marca suministradora de neumáticos ha contribuido a "una muy buena competición" en 2012 al protagonizar "muy buenas carreras".
El jefe alemán comentaba esta semana a la prensa: "Por supuesto, para un piloto siempre hay algo de frustración cuando crees que podrías conducir más rápido de lo que lo estás haciendo en cada carrera, pero has de tener cuidado. Esta es simplemente la naturaleza del piloto".