El Instituto de la FIA, encargado de la seguridad del deporte de motor, ha completado algunos test preliminares con el último dispositivo protector del 'cockpit'. El instituto trabajó con el equipo Lotus para crear un 'roll-hoop', un dispositivo que desviaría cualquier objeto procedente de la parte delantera del coche, como un neumático o trozos de un monoplaza. El dispositivo se fijaría justo delante del piloto y por detrád del escalón situado en el morro del monoplaza, y puede soportar un impacto de un neumático de 20 kilos que choque a una velocidad de 225km/h.
Se trata solamente de una idea
La seguridad en el habitáculo del piloto se ha convertido en motivo de gran preocupación a raíz de la muerte de de Henry Surtees, hijo del excampeón de F1 John, debido a que un neumático le golpeara en la cabeza durante una carrera de Fórmula 2 en Brands Hatch. Además, recordemos el accidente que tuvo Felipe Massa en 2009, cuando se quedó inconsciente en el monoplaza después de que un muelle impactara en la cabeza del brasileño. Y Michael Schumacher estuvo a punto de pasarle lo mismo en 2010, cuando el monoplaza de Vitantonio Liuzzi pasó por encima del coche del alemán y estuvo a punto de golpearle.
Por ello, el reciente 'roll-hoop' es la última innovación que podría reducir impactos como los anteriores. Andy Moeller, consejero técnico del Instituto de la FIA, explicaba que el test fue un éxito: "El dispositivo ha cumplido su función, en principio. Fue capaz de mantener alejada la rueda de la cabeza del piloto. Golpeamos el 'hoop' con el neumático desde la parte frontal y desde un ángulo lateral. Se trata solamente de un experimento, del que debemos comprender la fuerza de una colisión de tal magnitud. Todavía no hemos llegado a una solución final".