Los Juegos Olímpicos de Londres han sido el cobijo de Mark Webber en los primeros días de vacaciones para el australiano de Red Bull, que se ha mostrado algo molesto en cuanto a las continuas polémicas en las que su equipo se ha visto envuelto en las últimas semanas en relación al control de la altura de sus monoplazas, el mapeado de sus motores o las perforaciones en el suelo del mismo.
"Otros equipos han sido forzados a cambiar cosas de sus coches pero eso no es de interés general y las nuestras sí son para ese consumo. Red Bull siempre está en boca de la prensa," afirmó el australiano en palabras recogidas por la agencia de su país AAP, en las que aseguró que esta exposición pública del equipo está forzada por sus rivales.
"Es una táctica bastante aburrida por su parte, ¿no?," se preguntó el segundo clasificado del campeonato, después de ganar dos Grandes Premios en lo que va de temporada 2012. "Es bastante predecible. Ellos, en su pequeña burbuja, se creo que es genial".
"Habrá algo más"
En opinión del piloto australiano, la polémica volverá a rodear a Red Bull a pesar de las últimas decisiones de la FIA. "Habrá algo más, te lo prometo, pero siempre vamos a superar cada prueba," concluyó Webber que, dejando de lado las polémicas, reconoció que "necesitas el coche más consistente que rápido" para ganar el título ya que la temporada "está llena de altibajos".