Damon Hill ha regresado a los mandos de un monoplaza de F1 por primera vez desde que se retiró en 1999, y condujo el Red Bull RB6, que logró ganar el Mundial de Constructores y de Pilotos en 2010, este pasado domingo en Barcelona. El Campeón de 1996, que estuvo presente también en las World Series by Renault porque su hijo Josh estuvo compitiendo en la Fórmula Renault este fin de semana, completó varias vueltas con el coche de los de Milton Keynes.
Este domingo fue la primera vez que el inglés se subía a un F1 desde que completara por última vez el GP de Japón de 1999. "Hablé con Renault y les dije que iba a estar por allí por mi hijo Josh tenía que competir, y una cosa llevó a la otra y al final acabé pilotando un Red Bull. Sinceramente, no puedes negarte a eso, ¿no? Así que le doy las gracias a Renault y a Red Bull", explicó Hill sobre la oportunidad que tuvo de conducir el RB6 en Barcelona.
Agradece la oportunidad a Red Bull y Renault
Así, Hill ha sido el último Campeón en rodar con el RB6 después de que ya lo hiciera Alain Prost el pasado mes en el circuito francés Paul Ricard. "Hablé con Alain después de que lo condujera. Las cosas han cambiado un poco desde que se retiró en el 93, pero estos coches se parecen un poco a lo que conduje yo en el 99. Cosas como el embrague manual ya estaban cuando corría para Jordan. Los coches han cambiado mucho pero, en esencia, siguen siendo iguales", añadió Hill.
Además, el Campeón del Mundo también rindió homenaje a Red Bull y Renault por realizar estas pruebas y ofrecer estas oportunidades durante el año: "Es genial que ellos hagan eso. Con ello consiguen atraer a mucha gente que quizás no siga de forma tan cercana este deporte. Tener a un Red Bull que complete varias vueltas vende el deporte a todos los seguidores. Para ellos, ver a un coche rodar varias vueltas, con un antiguo piloto en él, quizás sea la inspiración que necesitan para vivir el deporte más intensamente".