La victoria que logró el finlandés Kimi Räikkönen este pasado domingo en Abu Dabi significó más que el simple hecho de que el piloto se sintiera contento por alcanzar el primer cajón del podio. El periódico Turun Sanomat ha revelado que hacía tanto tiempo que el equipo Lotus no conseguía una victoria, que Eric Boullier, jefe del equipo, no sabía cómo reaccionar en el momento de recoger el trofeo en el podio. "Estaba algo perdido con el protocolo, pero menos mal que Fernando Alonso estaba ayudándome y aconsejándome sobre lo que tenía que hacer", comenta el jefe de Lotus.
Primera victoria en mucho tiempo
Pero además de aprender los procedimientos protocolarios de la ceremonia del podio, Boullier admitió que el gran paso adelante de Räikkönen llegó en el momento oportuno, ya que los propietarios del equipo podrían haber comenzado conversaciones con inversores potenciales. "Creemos que demostramos a todo el mundo que somos serios y que podemos hacerlo bien, y eso va a ayudar en esas conversaciones comerciales", apuntaba Boullier.
Y Räikkönen, que aparentemente no le mostró el procedimiento a su jefe cuando subieron al podio, comentó que espera que su victoria ayude a que Lotus tenga más estabilidad y éxito: "Últimamente hemos tenido momentos duros. Es decir, han estado trabajando duro durante todo el año pero, con estos tiempos tan duros, hay un poco de incertidumbre sobre la situación general. Para la gente que lleva el equipo, que lo dirige, para todos, espero que esto les de algo más de apoyo y que las cosas mejoren y vayan incluso mejor que este año".