Al llegar la Fórmula 1 a un escenario nuevo como es el Circuito de las Américas, sede del Gran Premio de Estados Unidos que se está disputando en Austin, era una completa incógnita como se comportarían los neumáticos sobre su asfalto. Por ello, y para evitar sorpresas, la marca italiana llevó los compuestos más duros de su gama de neumáticos, algo que se ha demostrado como excesivamente conservador.
Absolutamente todos los pilotos han sufrido para calentar con rapidez los neumáticos medios, con los cuales han disputado los momentos importantes de la clasificación. Esto ha provocado diversidad de estrategias, como por ejemplo la de realizar 'stints' más largos de lo normal para conseguir calentar al máximo los neumáticos a la hora de dar una vuelta rápida. Aún así, Sebastian Vettel volvió a ser el más rápido de la clasificación, marcando un tiempo de 1:35.657 con el compuesto medio.
Estrategia de una parada debida a la escasa degradación de las gomas
El responsable de Pirelli Motorsport, Paul Hembery, ha comentado: "Los bajos niveles de degradación vistos, una superficie deslizante, y el mejor conocimiento de los equipos sobre los neumáticos al final de la sesión son los factores que nos llevan a pensar en una estrategia a una parada. Sin embargo, con un final de campeonato tan igualado, no queríamos hacer nada drástico en un trazado nuevo, algo que pudiera interferir en el resultado de esta carrera, pudiendo llegar a la última cita de la temporada con el campeonato en juego".
"El próximo año, con un mejor conocimiento de este trazado, podría darse una historia diferente. Felicitamos a Red Bull y a Sebastian Vettel por su dominio absoluto hasta este momento, con el tiempo más rápido en cada sesión de la clasificación. Sin embargo, la posibilidad de que mañana aparezca la lluvia – lo que podría provocar la aparición de los Cinturato verdes Intermedios y de los azules de lluvia – podría hacer que este no fuera el final de esta temporada", finalizó el inglés.