Michael Schumacher ha reconocido que su segunda despedida de la F1 en Interlagos este próximo fin de semana será "menos emotiva" que la que tuvo originalmente cuando termino la temporada de 2006. El siete veces Campeón del Mundo regresó con el equipo Mercedes en 2010, y su andadura con el equipo de Brackley terminará en Brasil sin haber cosechado grandes resultados. Si echamos la vista atrás, en 2006 estuvo disputádose el Mundial con Fernando Alonso, quien finalmente se llevó el gato al agua. Esta vez, Schumacher se encuentra en la decimoquinta posición de la clasificación, y no ha vuelto a puntuar desde que lo hiciera en la carrera de Italia, en el mes de septiembre.
"Mi marcha de la F1 será esta vez menos emotiva para mi que la de 2006, donde estaba luchando por el Mundial y todo era más intenso. Esta vez, prestaré más atención a mi despedida y probablemente la disfrutaré más. He tenido años fantásticos en la F1 y mucho apoyo de los aficionados en todo el mundo, y me gustaría agradecérselo a todos. Obviamente, estaría más contento si pudiera despedirme con una buena carrera, y estoy seguro de que haremos todo lo posible porque eso suceda así", comentó el piloto de Mercedes.
Gran contribución al equipo
Aunque los de Brackley cosecharon su primera victoria con Nico Rosberg en China, Schumacher solamente ha conseguido un podio durante su etapa en Mercedes. Pero Ross Brawn, jefe del equipo, asegura que Schumacher ha contribuído mucho al futuro éxito del equipo: "Será un fin de semana emotivo para todo el equipo. Nos hemos beneficiado y disfrutado del trabajo de Michael durante estos tres años, y me gustaría rendir homenaje a su compromiso, pasión y espíritu de equipo. Los resultados que todos esperábamos no han llegado, pero el progreso que ha hecho el equipo ha sido significativo, y estoy seguro de que veremos la recompensa en las próximas temporadas".