El vigente Campeón del Mundo, Sebastian Vettel, no ve razonable que aquellos que le critican achaquen gran parte del éxito del piloto al monoplaza del equipo Red Bull Racing. Este fin de semana, Vettel podría alzarse con su tercer título consecutivo en la F1, con tan solo 25 años. Desde el Gran Premio de Singapur, el de Red Bull encadenó cuatro victorias consecutivas y logró reducir la ventaja en la clasificación e incluso superar a Fernando Alonso, que lideraba el Mundial hasta entonces y cuyo F2012 se ha mostrado bastante menos competitivo que el RB8 durante casi toda la temporada.
"Creo que si echamos la vista atrás hasta no sé cuándo, al menos hasta dónde yo recuerdo, nunca ha habido nadie que haya tenido éxito con un mal coche. Es algo natural: llega un día en el que se combinan un buen piloto y un buen equipo, y eso es complicado de batir. Es normal estar en un coche menos competitivo. Todos hemos estado en esa situación. Michael Schumacher comenzó en Jordan, que no era competitivo, pero tuvo algunos buenos resultados, y Fernando empezó en Minardi. Nosotros tuvimos una buena temporada: mis comienzos con Red Bull fueron buenos, y fue la primera vez que fuimos competitivos, terminamos en el podio y conseguimos victorias", explica Vettel.
Concentración desde el primer minuto
A pesar de que Red Bull ha ganado en Brasil los últimos tres años y el piloto alemán cuanta con trece puntos de ventaja, Vettel asegura tener la mente abierta por lo que pueda pasar: "Esto es deporte y todo puede pasar. Tenemos que centrarnos en nosotros mismos. El fin de semana empieza el viernes por la mañana, no el domingo. Hemos de avanzar paso por paso para asegurarnos de que obtenemos el mejor resultado posible. Históricamente, siempre hemos sido rápidos aquí, pero sabemos que pueden pasar muchas cosas. Hemos de estar en forma para ver lo que podemos conseguir".