Una manifestación vecinal recorrió las calles del centro de Valencia para protestar por la celebración en la ciudad del Gran Premio de Europa (entre el 22 y el 24 de agosto) por considerarlo un disparate desde el punto de vista ambiental, social y económico.
La marcha transcurrió por la calle San Vicente, la plaza de la Reina y la plaza de la Virgen hasta llegar al "Palau de la Generalitat". Allí se leyó un manifiesto de diez puntos que cuenta con el apoyo de cuarenta asociaciones y en el que se subrayó que: "El circuito no es una necesidad ni una prioridad para ningún barrio."