La concentración que mantiene en todo momento es lo que diferencia a Sebastian Vettel del resto de rivales en la Fórmula 1, según ha afirmado Helmut Marko, expiloto de F1 y responsable de la cantera de pilotos de la escudería Red Bull en las categorías inferiores del automovilismo.
Así lo asegura el austriaco en declaraciones a Red Bulletin, en las que también carga contra el rival de Sebastian Vettel en la pasada temporada, Fernando Alonso, que se quedó a tres puntos del alemán tras el último Gran Premio de Brasil.
"La conducción de Sebastian fue prácticamente impecable. Pero es un fenómeno: siempre es así", aseguró el austriaco. "Después de las vacaciones de verano, su curva de rendimiento se dispara. Eso también ocurrió en los años anteriores. No sé cómo lo hace, pero si lo sigue haciendo, no será una casualidad".
"Eso nos lleva de nuevo a su método de preparación, la forma en que se desconecta del resto del mundo, por lo que aún puede recurrir a métodos que otros pilotos no tienen. Por ejemplo: Fernando Alonso está siempre muy ocupado con la política y sus 'divertidos comentarios'. Sin embargo, Vettel lo ignora todo, él no lee los periódicos o Internet. Y esa es la diferencia, nosotros nos concentramos en nuestro trabajo, en hacer el coche más rápido y ser el mejor equipo posible", afirma el consejero de la escudería austriaca.
Afirma que Webber se hunde bajo presión
Marko también ha admitido que el compañero de Sebastian en Red Bull, Mark Webber, alcanza picos de rendimiento muy similares al del alemán, pero no puede mantenerlo durante el resto del año debido a la presión que conlleva luchar por el Mundial.
"Me parece que Webber tiene un promedio de dos carreras al año en las que es imbatible, pero no puede mantener ese estado de forma a lo largo de la temporada", afirma el expiloto austriaco, de 69 años. "En cuanto sus opciones son buenas de cara al Campeonato del Mundo, tiene un problema con la presión que esto genera. En comparación con la mejora de Seb en este aspecto, me parece que Mark, de alguna forma, se desinfla".
"Si se produce algún fallo mecánico, como por ejemplo el alternador, entra muy rápidamente en una espiral descendente. Ningún piloto se mantiene inalterable ante eso, porque la tensión es palpable. En 2010 fue muy claro. Mark llegaba a la última carrera con mejores posibilidades que Vettel, y probablemente se lo hubiese llevado fácilmente. Esto mina la moral de cualquiera, es más que entendible", finalizó.