Marussia y Caterham son los dos equipos menos afortunados de la actual parrilla de la F1, y ambos temen que llegue el momento de enfrentarse a los elevados costes que supondrá llegar a la temporada 2014. Nuevos monoplazas que construir y nuevos motores turbo V6 bastante costosos son dos factores a los que se tendrán que enfrentar ambas escuderías dentro de un año. En lo que respecta al equipo ruso, y en concreto a su director deportivo, Graeme Lowdon, se pide igualdad para todos en lo que respecta al tema de los presupuestos.
"Hay un montón de herramientas para contener los costes. Esto es importante, ya que los seguidores quieren que sea una competición apretada, y no una competición llena de gastos. Es un reto para todo el mundo en el 'pit-lane', porque queremos asegurarnos de que los espectadores tengan su espectáculo. Eso es lo que más importa ahora, y eso no llegará si algunas condiciones no se mejoran. Una de ellas es que los presupuestos tengan sentido para todos los equipos y no solamente para algunos de ellos", comentó Lowdon en Autosport.
Camino espinoso
En lo que respecta al tema del motor, el equipo Marussia tendrá que escoger motorista entre Mercedes, Ferrari y Renault. Pero, por el momento, Lowdon admite que todavía no hay donaciones presupuestarios provistas por los motoristas: "Creo que hemos hablado con todos los motoristas, como todos los demás. Las reglas aún no se han establecido completamente para 2014 y por eso es complicado mantener las primeras conversaciones. Estamos esperando impacientes las indicaciones sobre las proposiciones comerciales y técnicas de los nuevos motores".