Como les ocurre a los equipos, Pirelli (marca oficial suministradora de neumáticos de la F1) está esperando a que lleguen los primeros entrenamientos de la nueva pretemporada para tener una mejor idea sobre el comportamiento de los neumáticos que se han creado para la temporada 2013. No obstante, Paul Hembery, director de la marca, advierte que será complicado sacar conclusiones en febrero: "Veremos cómo van los entrenamientos invernales. Puede ser algo extraño, porque las condiciones no son normales. Excepto en Austin, donde una mañana estuvimos a 7ºC, nunca rodamos en temperaturas tan frías durante el año. En general, solemos rodar con unos 15ºC en los circuitos, y durante los entrenamientos invernales estamos por debajo de ese valor. Entonces, eso podrá darnos unos resultados algo extraños en relación al verdadero rendimiento de las gomas".
Por suerte, Pirelli pudo probar sus nuevos neumáticos para este año durante el último fin de semana de la pasada temporada, en el circuito brasileño de Interlagos. "A pesar de que algunos equipos estaban concentrados en ganar el Campeonato (Red Bull y Ferrari), las sensaciones que tuvieron sobre los compuestos se asemejaban a las nuestras. Los equipos vieron que no habrá grandes cambios al respecto, quizás un poco en el área de la aerodinámica a causa de la forma, pero estamos contentos porque es el objetivo que esperamos alcanzar. De hecho, los equipos ya tienen mucho que hacer para preparar la revolución de 2014, por eso están contentos de no encontrarse este año, en comparación con el anterior, con un gran reto que superar al tratar de descubrir el secreto de nuestras gomas", apuntó Hembery.