'CUADERNO DE VIAJE III'

Test de Jerez 2013: a punta de pistola

Tercer día de sensaciones vividas en el 'paddock'. Sentimientos y vivencias multiplicados por tres.

Pablo Grau 7 de Febrero 2013 21:47

Tercer día de entrenamientos de pretemporada. Lo cierto es que esta mañana he comenzado el día 'a lo grande'. Instantes antes de coger el autobús que te lleva al circuito, me he dado cuenta de que me había olvidado el pase de prensa en el hotel. Por lo tanto, me ha tocado hacer algo de ejercicio e ir corriendo hasta la habitación para cogerlo. Eso sí, el conductor del autobús se ha portado de maravilla, y no se ha ido hasta que no he regresado con el pase. Una vez en el circuito, Red Bull nos ha abierto de nuevo sus puertas para desayunar en su 'motorhome'. Lo mejor para empezar el día es comer bien, así que le he dedicado alrededor de una hora al desayuno. Instantes después, ya me encontraba en la sala de prensa, enfrascado en los tiempos de los test que podía divisar desde las pantallas situadas encima de las mesas de la sala. Ya olía a neumático...

En un momento de descanso, he podido volver a tomarme un café en el equipo Lotus, donde he estado hablando con una compañera que me está ayudando mucho. La verdad es que la charla ha sido de lo más interesante y cada vez me voy sintiendo más a gusto entre tanto camión y neumático Pirelli. Luego, ya he regresado a la sala de prensa y no he salido hasta la hora de comer. Durante ese tiempo, ha habido muchos comentarios respecto a los tiempos marcados por los pilotos. Algunos no se creían del todo que el Ferrari de Felipe Massa estuviera primero, y lo achacaban al hecho de haber usado neumáticos blandos. Otros cruzaban los dedos para que el Mercedes tuviera un buen día y los de Brackley no vieron ahogado su gozo en un pozo.

Bajo mi punto de vista, no puedo decir que el tiempo de Felipe Massa haya sido fruto de la casualidad, pero es cierto que todos han estado probando con diferentes cargas de gasolina y con diferentes compuestos Pirelli, por lo que es muy complicado hacer un balance totalmente 'justo' sobre lo sucedido en Jerez. Personalmente, si queréis que me moje, creo que el Lotus E21 va tremendamente bien: Grosjean lo demostró el martes y el miércoles, y Räikkönen comentó hoy que se sintió muy cómodo y que el coche está mejor que el del año pasado en esta época. Por otro lado, el RB9 creo que también va a dar mucha caña. La velocidad en curva es envidiable y parece que los de Milton Keynes avanzan paso a paso con su nuevo bólido. Dejemos que los equipos hagan su trabajo y empecemos a juzgar de cara a final de mes, cuando Australia quede a la vuelta de la esquina.

A la hora de la comida tuve la suerte de encontrarme con Pastor Maldonado en el 'paddock'. Aproveché para presentarme yo mismo e informarle del medio al que representaba. Lo cierto es que fue muy amable y no tuvo reparos en atenderme. Estuve hablando unos instantes y concreté que nos volveríamos a ver en Barcelona. Esto es una de las cosas que más destaco de esta experiencia: estamos acostumbrados a ver a los pilotos en la televisión, pero es increíble lo cercanos que pueden ser algunos de ellos. En ese sentido, me estoy llevando una grata sorpresa. Después de este suceso, el equipo Mercedes me acogió durante la comida y me permitió comer en su 'hospitality'. Toda una experiencia que vosotros, desde casa, podréis ver como algo lejano e incluso algo difícil de conseguir, pero que desde el 'paddock' se ve desde otra perspectiva.

Por la tarde, tuve de nuevo la posibilidad de acceder al 'pit-lane'. Esta vez tenía más ganas, porque había pilotos que se estrenaban este jueves, como era el caso de Sebastian Vettel, Esteban Gutiérrez o Valtteri Bottas. Adelante, atrás, en el muro, en los garajes...solamente me faltó hacer el pino en el 'pit-lane' para completar todo lo que hice allí. Muchos me habéis pedido que os traslade mis opiniones o sensaciones a nivel competitivo que veo en el momento que estoy en el 'pit-lane'. Solamente os puedo decir que se nota el trabajo que dedican los equipos, la concentración que ponen a la hora de preparar los monoplazas, etc. Cualquier cosa que pudiera decir ahora mismo sobre las posiciones de los pilotos o de quién es más competitivo, sería en vano. La pista de Jerez es muy abrasiva con los Pirelli y los datos que se obtienen en este aspecto no son demasiado significativos. Por ello, hay que tener paciencia.

Finalmente, el día ha terminado con las rutinarias ruedas de prensa. En esta ocasión, pude asistir a dos de ellas. La primera a la que fui fue a la de Felipe Massa, donde dejó claro que aún es pronto para saber qué equipos están por delante, pero también ha comentado que están trabajando en la buena dirección y necesitan dedicar aún muchas horas en el coche. Pero debo decir que a Massa le ha salido un competidor: alguien bajito, de pelo castaño y con cara de no haber roto un plato en la vida. Su hijo, Felipinho, quién no dudó en posar junto a su padre, alzando el pulgar en modo de 'todo va bien', como si de un piloto profesional se tratara. Un encanto. La segunda rueda de prensa a la que fui fue a la de Kimi Räikkönen. Tuve suerte y pude sentarme a su lado, pero os prometo que ni siquiera así le escuchaba. ¡Hay que ver lo bajo que habla el finlandés! Esto ha marcado un momento gracioso, ya que cada vez me acercaba más a él para intentar escucharle, hasta que algunos compañeros tuvieron que avisarme si podía alejarme porque estaba ocupando el centro de sus fotografías. Momentazo.

Y esto ha sido todo por hoy. Pero no quiero despedirme sin antes agradecer a todos los que hacen posible esta experiencia. En primer lugar, a esta web, que me ha permitido estar esta semana en Jerez, viviendo este sueño. En segundo lugar, a todos los compañeros que me han echado un cable, dejando de lado, a veces, cosas que tenían entre manos. Y en tercer lugar, al personal de los equipos y a los pilotos con quien he podido encontrarme: realmente han marcado la diferencia a la hora de sentirme cómodo y a gusto. El viernes finalizan los entrenamientos, pero este sueño no termina, sino que se queda en 'stand by' hasta Barcelona, donde volveré a sumirme en un profundo sueño, lleno de olores y sensaciones que siempre conducen al mismo sitio: la F1.

Continuará...

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