El triple campeón del mundo Sebastian Vettel restó importancia a la falta de ritmo del Red Bull RB9 en la carrera de Australia, aunque admitió que fue algo que no esperaban y les pilló por sorpresa. Los monoplazas de Milton Keynes dominaron la clasificación del sábado consiguiendo ocupar completamente la primera fila de la parrilla, pero el domingo se vieron superados por Lotus y Ferrari, quienes fueron capaces de tratar mejor sus neumáticos y tener un mejor ritmo global de carrera.
A pesar de ello, el alemán consiguió minimizar las pérdidas y terminar en el podio, al igual que ocurriese la pasada temporada, cuando tuvieron un inicio complicado y se vieron en la obligación de recuperar terreno: "Conseguimos un resultado muy bueno, pese a todo. El domingo dije que quizás no teníamos suficiente ritmo de carrera, y existe una relación directa entre eso y la degradación de los neumáticos para superar a los dos coches que están por delante de nosotros", explicó Seb en el paddock de Malasia.
"En Australia veíamos posible la victoria. No afrontas una carrera pensando que está prácticamente ganada pero, sinceramente, no esperábamos tantos problemas en ella, sufriendo con los neumáticos", prosiguió. "Intentaremos batirles esta semana, seguro. Mañana veremos cuán buena o mala es la situación, e intentaremos tratar los neumáticos un poco mejor para estar un poco más adelante. Hemos aprendido muchas cosas, y otras muchas aún están por comprender, pero hasta ahora sólo han sido un par de días, la situación no es dramática."
No espera un milagro en la calurosa y agresiva pista de Malasia
Vettel no cree que en Malasia vayan a tener todos los problemas solventados, dado no sólo que la carrera se disputa con un escaso margen de tiempo respecto a la de Albert Park, sino también que el calor y la agresividad de la pista de Sepang seguirá provoganco una gran degradación en las Pirelli.
"En Australia las temperaturas eran más bajas de lo que esperábamos, así que necesitamos comprobar cómo cambia la situación aquí. Esta siempre ha sido una pista agresiva, así que tampoco espero un milagro aquí; creo que aún sufriremos una alta degradación", confiesa el tricampeón. "Actualmente no existe la posibilidad de cambiar la puesta a punto para el domingo, así que tenemos en mente un par de configuraciones para el coche, pero nada ha cambaido respecto a años anteriores. Es algo que hacemos todos los años, no queda tan claro para la gente de fuera pero es algo que pruebas continuamente."
"Partimos de una cierta puesta a punto que utilizamos la mayor parte del tiempo, y después intentas ser un poco más específico para cara circuito. El de Melbourne es diferente a este: aquel es más parecido a un circuito urbano, y este se parece más a un circuito de carreras habitual. La fluidez del circuito es diferente, con más curvas rápidas y más carga en los neumáticos en general, así que debes adaptarla un poco", explica.
Sebastian también quiso aclarar que en ocasiones hay factores a la hora de controlar la degradación de los neumáticos que están fuera del control del piloto durante la carrera: "Es obvio que puedes comprobar los neumáticos a simple vista, y entonces tratar de reaccionar. Hay diversas estrategias , intentas adaptarte y reaccionar al agarre que tienes, pero siempre intentas ir lo más rápido posible."
"Controlar los neumáticos es algo que no siempre está dentro del control del piloto. A veces no hay mucho que puedas hacer desde el interior del coche. Lo que puedes intentar es cometer menos errores, porque el hecho de tener poco agarre te lleva a tener errores, así que debes adaptarte."