El equipo Lotus termina el fin de semana con algo de decepción en el rostro de sus pilotos. Tras una mala salida, Kimi Räikkönen solamente pudo empujar y pelear con sus rivales para terminar en segunda posición, algo que al propio piloto le sabe a poco después del ritmo que tuvo el monoplaza todo el fin de semana. Por otro lado, Romain Grosjean salió peor parado en Shanghái. Su ritmo fue menos competitivo que el de su compañero y, a pesar de haber salido sexto, cruzó la línea de meta en la novena plaza, ganando dos puntos para el equipo.
Kimi Räikkönen (2º):
"La segunda posición no es exactamente lo que quería, pero en las circunstancias que hubo, fue lo mejor que se pudo hacer. No estoy completamente contento porque no ganamos, pero eso lo que hay, y la segunda plaza es un buen resultado, después de una mala salida y del incidente con Sergio Pérez. Las cosas fueron complicadas, pero estoy sorprendido por cómo fue el coche. Obviamente, hubieron algunos problemas que no fueron ideales, pero simplemente tuve que acostumbrarme y, aún así, tuve una buena velocidad".
Romain Grosjean (9º):
"Fue una carrera larga y dura y, de nuevo, no conseguimos lo que queríamos. No estoy contento con la novena posición. Empecé sexto y tuve una buena oportunidad de terminar entre los cinco primeros, pero por desgracia no pude conseguirlo. Hice todo lo que pude, pero no pude lograr el ritmo que quería, y tampoco ayudó el verme con mucho tráfico. Fue bueno puntuar para el equipo, pero quiero más en Baréin".
Eric Boullier, jefe del equipo Lotus:
"Es un buen resultado para el equipo. Kimi demostró una vez más porqué es uno de los mejores pilotos del mundo al ser uno de los más rápidos en la pista, a pesar del daño sustancial que tenía su coche. Como equipo, pudimos darle una buena estrategia que nos permitió batir a Lewis y a Mercedes en una reñida batalla. Romain tuvo un día más complicado, pero puntuó en otra carrera positiva. Sin la mala salida y sin el incidente de Kimi habríamos luchado por la victoria".