Martin Whitmarsh se alegra de que Sergio Pérez haya recuperado su agresividad en pista, pero "no aprueba" los toques que tuvo con su compañero de equipo Jenson Button en Baréin.
"Había un montón de ruido en la oreja diciéndome que los calmará. Pero yo no emití ni una sóla orden de equipo. Esa no es la manera en la que competimos. Estoy contento con la forma en que Checo corrió - era competitivo, y eso es bueno para el equipo. La única cosa que no apruebo fue el golpear a su compañero de equipo. Se pasó de la raya. Le di mi opinión al respecto después", explicó Whitmarsh en declaraciones a The Guardian.
Checo pudo acabar con su propia carrera o con la de Button
Por otro lado, Whitmarsh no tuvo problema en reconocer que Button está molesto con su compañero de equipo por la excesiva agresividad que tuvo en sus enfrentamientos en pista: "Jenson está molesto, pero él es adulto. Si hubiera sido golpeado por su compañero de equipo y hubiera estado feliz me habría preocupado. Durante la carrera ambos se perjudicaron; estaban en combate mortal y era un reto para los dos. Podría haber sido peor, ya que como le explique a Checo, podría haber pinchado los neumáticos de su compañero de equipo y se podría haber llevado su propio alerón delantero. Así que no es la cosa más inteligente que hacer en una carrera".