El Gran Premio de España marca tradicionalmente el inicio de la temporada europea y, por tanto, el primer paso evolutivo de los monoplazas. Aunque la actual normativa provoca que el desarrollo se haya convertido en algo mucho más progresivo que hace unos años, Montmeló siempre supone un primer examen para la capacidad de unos y otros en ese sentido, una cuestión decisiva de cara al campeonato. En este aspecto, algunos equipos destacaron sobre el resto, como es el caso de Lotus o Toro Rosso, si bien no hubo excesivos cambios en las posiciones que los distintos equipos ocupan desde el inicio de la temporada.
Las estrellas del GP
Ferrari
Excepcional fin de semana para el equipo italiano que, desde el mismo viernes, demostró contar con un ritmo de carrera muy prometedor en un circuito con alta exigencia aerodinámica. Si bien la clasificación no fue todo lo positiva que debería para ninguno de los dos pilotos, el domingo quedó muy claro que Ferrari está en condiciones de plantar cara a cualquiera cuando se ponen en juego todas las variables, entre las que se incluye la gestión de los neumáticos.
Alonso cimentó su victoria en una primera vuelta rebosante de determinación y, posteriormente, el equipo dibujó una estrategia perfecta que incluyó adelantar la última parada un par de vueltas para contrarrestar un pinchazo lento. Por su parte, Massa hizo frente a una mala posición de salida tras ser sancionado por molestar a Webber en clasificación y llegó a dar esperanzas de doblete a su equipo, ofreciendo de nuevo una consistencia que hacía demasiado tiempo que se echaba en falta por parte del brasileño.
Kimi Räikkönen
El finlandés llevaba mucho tiempo demostrando que su talento sigue intacto y que las cualidades del Lotus le pueden proporcionar opciones muy serias de victoria si consigue clasificar bien los sábados. Y en Montmeló consiguió hacerlo, destapándose como principal opositor a Fernando Alonso con una estrategia alternativa de tres paradas. Con una -de nuevo- excelente gestión de los neumáticos, Kimi está siendo capaz de contrarrestar el pequeño déficit de velocidad que el Lotus tiene respecto a Ferrari y Red Bull, manteniendo sus opciones de título intactas. Para ello será vital que el equipo de Enstone mantenga el nivel de evolución, cosa que ha quedado bien demostrada hasta el momento.
Jenson Button
Tras un decepcionante Gran Premio de Bahréin, el inglés tiró de experiencia para batir de nuevo a su compañero de equipo, que durante gran parte de la carrera parecía otra vez en condiciones de vencerle. Jenson no pudo clasificar en Q3 tras reglar su McLaren con presiones demasiado altas, lo que le restó agarre. Pero el domingo optó por una estrategia alternativa de tres paradas y, a pesar de ser decimoséptimo tras el primer paso por meta, consiguió llegar hasta la octava plaza final por delante de Pérez.
Daniel Ricciardo
El australiano volvió a brillar en un Gran Premio en el que su equipo mostró una cara muy diferente a la de anteriores carreras gracias a su último paquete de mejoras que incluyó un nuevo sistema de carrocería/escapes/túnel al estilo de Lotus y Red Bull. Ya el viernes Daniel admitió que había posibilidades de llegar a la Q3 y el sábado se quedó a sólo una décima de conseguirlo. Pero el ritmo de tandas largas presagiaba una buena carrera y así fue, aunque no sin contratiempos. Una mala salida y unas primeras vueltas complicadas como consecuencia de unos neumáticos fríos propiciaron que Ricciardo pidiera cambiar la incidencia del alerón delantero y las presiones de los neumáticos en su primera parada. Desde ese momento todo fue mucho mejor y Daniel caminó sólidamente hacia los puntos por segunda vez esta temporada.
Esteban Gutiérrez
El mexicano ha sufrido mucho en este inicio de temporada, pero en un circuito sobradamente conocido para él, tiró de talento y estuvo cerca de conseguir sus primeros puntos del año, llegando incluso a liderar la carrera y a conseguir la vuelta rápida de la carrera -eso sí, totalmente intrascendente con la normativa actual-. El nuevo alerón trasero contribuyó a mejorar la estabilidad del monoplaza, pero el Sauber volvió a demostrar sus carencias en clasificación, aunque también mejoría en condiciones de carrera. Esteban se aprovechó de ello y nos regaló una gran carrera que debe marcar el inicio de su evolución como piloto de Fórmula 1.
Los estrellados del GP
Red Bull
El equipo que, en ocasiones, parece imbatible, empieza a acumular más errores de los habituales, a pesar de lo cual sigue líder de ambos campeonatos. Pero eso no debe enmascarar lo que fue un Gran Premio muy discreto, con Vettel fuera del podio tras una sorprendente falta de cintura del muro de boxes en lo que concierne a la estrategia y recurrentes problemas con el graining, circunstancia que está lastrando de manera decisiva la velocidad natural del RB9. Algo que no es novedoso ni sorprendente, por lo que sorprende aún más que el equipo se empeñara en intentar una estrategia de tres paradas con Vettel y que, además, tardara tanto en darse cuenta de que no sería posible.
Mercedes
El equipo alemán volvió a volar sobre Montmeló tras sus grandes tiempos de pretemporada... pero sólo el sábado. Demasiadas veces hemos visto cosas parecidas en Mercedes, que convirtió un doblete en clasificación en un sexto y duodécimo puestos respectivamente. El sobrecalentamiento de los neumáticos volvió a recordar a los momentos más bochornosos de 2012 y el efecto inicial se ha diluido de golpe para hacernos ver la realidad de un modo claro y diáfano: Mercedes no es un equipo grande.
Adrian Sutil
El buen rendimiento del alemán no debe pasar desapercibido, a pesar de que está contando con grandes dosis de mala suerte en este inicio de temporada. Su rendimiento es excelente y su ritmo de carrera volvió a ser muy prometedor pero, como en Baréin, no sirvió de nada en el fondo del paquete. Y es que Sutil es, sin duda, unos de los estrellados del Gran Premio por lo que pudo conseguir y no consiguió, en esta ocasión tras un nuevo problema mecánico en su primera parada en boxes. A veces la mala suerte y las averías pesan más que el buen hacer de un piloto.
Nico Hülkenberg
Nico, como Adrian Sutil, es otro ejemplo de como situaciones ajenas al piloto pueden echar por tierra una carrera prometedora. Aspirante a puntuar con honores, Nico terminó perdido en el pelotón tras un incidente en boxes con Vergne, que dañó su alerón delantero y acabó con sus opciones de puntuar. Las oportunidades pasan y los equipos modestos empiezan a lamentar lo que a final de año serán, sin duda, puntos muy valiosos.
Williams
El caso del equipo de Grove no es el de la mala suerte, sino el de un trabajo mal hecho desde el inicio. El coche atrevido e ilusionante que vimos en pretemporada ha dado paso a un monoplaza lento y difícil de conducir que ha tocado fondo tras lo que debía ser el inicio de su recuperación. Que Charles Pic terminara el Gran Premio a sólo 2.4 segundos de Bottas lo dice absolutamente todo.
El destello
Uno de los momentos cumbre de la temporada fue, sin duda, el adelantamiento que Fernando Alonso ejecutó en la curva 3 en la primera vuelta de la carrera. El español salió muy bien, como es habitual en los Ferrari, pero el rebufo de los Mercedes le sirvió a Vettel para mantener su posición, algo de lo que también se benefició Räikkönen. Entonces, Alonso se preparó una mejor salida de la curva 2 para superar a Kimi por tracción, tomando el exterior de la curva 3 para emparejarse con Hamilton y utilizar una pequeña porción de KERS que había conservado a propósito para tal efecto. Como el propio piloto reconoció, fue una maniobra que se pudo ver en la carrera de GP2 y decidió apostar por ello para ganar posiciones. Un adelantamiento con un mérito especial, más que por la acción en sí, por la intención de intentarlo en un lugar que sus rivales no esperaban.
El detalle técnico
El circuito español siempre ha sido el predilecto de los equipos a la hora de probar sus monoplazas, ya que cuenta con todo lo necesario para extraer conclusiones de todos los aspectos del coche. Con curvas de radio largo y de alta velocidad para evaluar la eficiencia aerodinámica (primer sector), Montmeló cuenta además con zonas en las que la tracción y la estabilidad en frenada son aspectos importantes (tercer sector). También posee rectas largas para poner a prueba el drag, los motores y el DRS, así como un asfalto abrasivo en el que la degradación es siempre algo a tener en cuenta. En definitiva, un laboratorio con todo lo necesario para definir qué monoplaza es competitivo en todas las circunstancias.