El presidente de la FIA ha aceptado reunirse con los pilotos de la F1 para tratar su descontento por el incremento del coste de la súper licencia.
Los rumores sobre una posible huelga de pilotos comenzaron a correr ayer por el paddock de Magny Cours después de que la GPDA escribiera una carta a Mosley en la que argumentaba que el aumento de la licencia para 2008 era excesivo.