La revista brasileña 'Warm Up' ha hecho públicos los detalles de la remodelación de Interlagos, sede del Gran Premio de Brasil, que hará posible que el circuito siga albergando la Fórmula 1 después de varios años en los que Bernie Ecclestone haya insistido a los gestores del trazado para que realizaran estos cambios en busca de mejorar el antiguo complejo de boxes y ampliar la seguridad de la pista.
La remodelación, en la que se invertirán unos 60 millones de euros, será similar a la de Silverstone ya que cambiará la recta principal del trazado que pasará a la Reta Oposta, donde se construirá un nuevo edificio de boxes de 364m2 de tamaño, prácticamente el doble de los actuales, que fueron construidos a principios de los años noventa. Eso hará que los monoplazas entren al carril de boxes antes de afrontar la curva do Sol.
Las obras, si se sigue el curso previsto, comenzarán el próximo mes de octubre y serán interrumpidas por la celebración del Gran Premio de Brasil 2013 de Fórmula 1, para terminarse de cara a la temporada 2014. Una vez se haya concluido esta fase, se modificará la curva do Lago, actual última curva del trazado, para ampliar su anchura y mejorar la seguridad en dicha zona. Todo el proceso tiene previsto terminar en septiembre de 2014.