El equipo Ferrari ha insistido en que no hay ninguna crisis en su relación con Fernando Alonso, a pesar de que Luca di Montezemolo, el presidente, no estuviera contento con los comentarios que hizo el español tras el GP de Hungría. Di Montezemolo dio una reprimenda a la conducta del piloto después de que este comentara a los entrevistadores que quería "un coche como los demás" como regalo de cumpleaños. Las declaraciones del presidente, que abogaban a la unidad, pronto encendieron la pólvora y se especuló que Ferrari tenía problemas internos.
No obstante, un portavoz de la Scuderia señaló el martes que, a pesar de lo sucedido, Montezomolo y Alonso estaban unidos por su deseo de que Ferrari completara una mejor segunda parte de temporada. "Di Montezemolo es el primero en apoyar la petición de los pilotos de mejorar la competitividad del coche tan rápido como sea posible. Comprende totalmente las frustraciones de Fernando después de lo que ha sido una de las carreras más complicadas del año. Sus palabras deben verse como una inyección p'ositiva. No fueron más que un estímulo en la motivación para inspirar al equipo y estar unidos hacia un objetivo común", señaló el portavoz.
Por su parte, el equipo ya ha comenzado a trabajar para conseguir un monoplaza con el que Alonso pueda luchar por el Mundial. Desde la jornada del martes, la Scuderia se encuentra en el circuito francés de Magny-Cours con Pedro de la Rosa, donde completa un test de tres días con el monoplaza de 2011 (el F150 Italia) para desarrollar un programa y comprobar el simulador y la correlación en la pista. Los test se realizan con los neumáticos de prueba de Pirelli, y el equipo ha completado el proceso necesario de aprobación de la FIA para utilizar el coche.
La fortaleza técnica crece con Allison
Por otro lado, la escudería de Maranello mejorará su estructura técnica después de anunciar que James Allison, exdirector técnico de Lotus, formará parte de sus filas a partir del mes de septiembre. Allison trabajará junto al director de ingeniería, Pat Fry, y se encargará de los aspectos de diseño del monoplaza y del desarrollo aerodinámico. Fry, en cambio, se encargará de la dinámica del vehículo, las simulaciones la ingeniería de pista y la estrategia.
La decisión de separar los papeles surge después de que Stefano Domenicali, jefe del equipo, señalara que la estructura debía reforzarse, y que Fry debería centrarse en el área que mejor dominaba. "La llegada de James junto a Pat es, sin duda, un estímulo y establece la base de un equipo técnico muy fuerte y equilibrado. James siempre ha sido un ingeniero muy bien valorado, y completa un proceso iniciado por Stefano Domenicali para reforzar el departamento técnico", esplicó la misma fuente del equipo.