Si normalmente el GP de Malasia suele ser emocionante, el de este año puede pasar a los anales, si se cumplen las previsiones meteorológicas. El departamento meteorológico del país asiático ha anunciado lluvia y tormentas coincidiendo el próximo fin de semana con la disputa del GP de Malasia, si bien es verdad que la probabilidad más alta de precipitaciones es para el sábado. Todo parece indicar que los tres días se gozará de un cielo soleado por la mañana, por la tarde están previstos fuertes aguaceros.
"Tendremos que ver cómo se adaptan los pilotos a una pista mojada", comentaba uno de los responsables del circuito de Sepang, Datuk Azmi Murad. Las jornadas de entrenamientos de la pasada semana ya tuvieron que alargarse un día más a causa de un fuerte chaparrón que sorprendió a los equipos el jueves. Uno de ellos, Nick Heidfeld (BMW), señalaba: "Yo ya he vivido tremendos chaparrones en Sepang. Aquí, la lluvia no cae de una forma normal. Cuando el cielo descarga, todo desaparece bajo la lluvia.".
Por citar un dato, la edición del GP de Malasia de 2001 también estuvo pasada por agua, y en aquella ocasión la victoria fue para Michael Schumacher.