En plena hemorragia de rumores sobre el mercado de fichajes, uno de los pocos pilotos que parecen tener su asiento seguro es, paradójicamente, uno que jamás se ha subido a un Fórmula 1: el joven ruso de 18 años, Sergey Sirotkin. Según ha confirmado el equipo Sauber, la obtención de la necesaria superlicencia es lo único que separa a Sirotkin de hacerse con un asiento oficial.
"Sabemos que nos gustaría tener a Sergey como piloto el año que viene pero aún necesita la superlicencia y eso es algo que necesitamos tomarnos en serio," afirmó Monisha Kaltenborn en el paddock del circuito de Monza durante el Gran Premio de Italia, primera fecha en la que el joven ruso participa como miembro del equipo con el objetivo de habituarse al trabajo que se realiza durante los Grandes Premios.
"Así que no deberíamos pensar que tan sólo va a subirse así como así. Estamos convencidos de que puede hacerlo, así que daremos lo máximo para prepararlo, pero es un gran salto. Si todo funciona veremos las opciones que tenemos y anunciaremos algo proximamente," comentó la jefe de equipo de Sauber sobre el que presumiblemente se convertirá en el piloto más joven de la historia de la Fórmula 1 en 2014.
Tendrá que completar 300 kilómetros
A pesar de que resulta bastante improbable que Sirotkin consiga el permiso por sus resultados deportivos (tendría que ganar la Fórmula Renault 3.5, donde actualmente ocupa la octava posición), el ruso tendrá que esperar a sumar 300 kilómetros al volante de un monoplaza de Fórmula 1. Con la actual limitación de pruebas y al haber pasado los tests para jóvenes pilotos, la opción más lógica del equipo suizo será esperar a la próxima pretemporada ya que las pruebas con un monoplaza de 2011 que el equipo ha previsto para su joven promesa no computan a la suma.