Mientras que Sebastian Vettel terminó en tercera posición, fue su compañero de equipo, Daniel Ricciardo, el que se vió afectado una vez más por problemas de flujo de combustible. Recordemos que ya fue descalificado por ello en Melbourne. El sensor falló desde el principio de la carrera pero el equipo, en esta ocasión, evitó la descalificación siguiendo el consejo de la FIA sobre cómo cumplir con las normas en ausencia del dispositivo problemático de Gill Sensors.
"Sí, esta vez la FIA nos pidió que comprobáramos la correlación de los datos y lo hicimos. Todavía tenemos que entender por qué siempre tenemos problemas cuando los demás no los tienen. Podría ser algo relacionado con el combustible, pero aún estamos tratando de comprenderlo", explicó Helmut Marko para la televisión Sky haciendo referencia a la teoría que ha estado circulando por el paddock sobre que el combustible total de Red Bull podría ser un factor clave.
El asesor de Red Bull también declaró a la web oficial de la Fórmula 1 que el equipo intervino cuando la gravedad de los problemas quedó confirmada en los test de invierno e insiste en que la única parte debilitada del RB10 es el motor. "Comenzamos una colaboración junto con Toro Rosso y Renault para seguir adelante. Con un motor mejor estaremos en la cima de nuevo, pero en este momento, con un déficit de alrededor de 80 caballos de potencia, no es posible".
"Estás obligado a trabajar con lo que tienes, ya que no puedes decir 'oye, a partir de mañana vamos a utilizar un motor Mercedes', y es que este coche está construido alrededor del tren de potencia de Renault", explicó dando a entender que si fuera posible cambiar a un motor mejor, Red Bull lo haría. También añadió que el equipo está trabajando en el problema de su déficit de velocidad en línea recta. "Estamos intentando hacer todo lo posible para encontrar más velocidad en las rectas sin que afecte a las curvas y tengo que decir que desde este punto de vista estamos progresando".
Otros motores Renault también con problemas
Por su parte, Christian Horner, jefe del equipo, sugirió que los continuos problemas demuestran que Red Bull tiene un argumento de peso para presentar en la próxima audiencia de apelación. "Creo que demuestra claramente que hay problemas con los sensores", dijo y añade que no tiene "ni idea" de por qué Red Bull está teniendo más problemas que sus otros rivales.
La revista alemana Auto Motor und Sport informó que el Lotus conducido por Pastor Maldonado en Malasia también tuvo un problema con el sensor de combustible, por lo que toma más fuerza otra teoría en la que las frecuencias producidas por unidad turbo de Renault podrían estar causando los problemas. La publicación también afirma que es posible que las modificaciones de la instalación realizadas por los equipos a la unidad Gill podrían dañar el motor Renault.
Sin embargo, los problemas de Ricciardo en Sepang no se limitaron al sensor de combustible, ya que tuvo que hacer frente a un problema que dejó suelto su alerón delantero y a neumático mal puesto en la parada de boxes con su consecuente penalización. La "incorporación insegura" tras la parada también penalizará al piloto con diez posiciones en el próximo Gran Premio de Baréin. Aún así, Horner confiesa haber quedado impresionado con el australiano en lo que llevamos de temporada. "Hoy no le ha ido bien, pero él baja del coche y tiene una sonrisa en su cara. Sabe que las cosas saldrán bien".