Este pasado domingo, Kimi Räikkönen negó rotundamente los rumores de que los problemas que ha tenido hasta ahora con el equipo Ferrari se deben a una falta de motivación por competir en la F1. Mientras que Fernando Alonso pudo firmar el primer podio de la escudería en esta temporada, el finlandés tuvo problemas todo el fin de semana. Y es que Alonso cruzó la meta dejando a su compañero en el octavo puesto y a casi un minuto de distancia. Pero a pesar de esta gran distancia, al Campeón del Mundo de 2007 no le gustó que le preguntaran si una posible falta de motivación pudiera ser el motivo o la raíz de los problemas que está teniendo con el nuevo F14-T.
"No sé porqué esto sale una y otra vez. Si no estuviera motivado, no estaría aquí y, sin duda, no estaría respondiendo a vuestras preguntas. He estado en este deporte el tiempo suficiente como para saber que a veces ls cosas son simplemente así", señaló el piloto a la prensa alemana. No obstante, Räikkönen admitió que no está demasiado seguro de porqué está teniendo tantos problemas: "En la carrera, simplemente fui demasiado lento, pero no hay un problema en concreto que hayamos encontrado". El piloto empleó este fin de semana un chasis diferente, pero el finlandés piensa que el problema es "probablemente algo relacionado con mi estilo de conducción y con el circuito y sus temperaturas".