Nico Rosberg tiene dudas acerca del comportamiento del Williams en Valencia, pero tiene clara una cosa. En este circuito todos empiezan de cero y el que más rápido se adapte tendrá mucho ganado. El problema es que al ser un circuito urbano, va a ir cambiando a alo largo de la carrera.
"En un circuito urbano, el problema es que no hay grip al principio. En una carrera normal aprendes en 10 vueltas, pero cogerle el truco a Valencia costará algo más, quizás 20 vueltas. Hemos estado intentando adivinar la puesta a punto por lo que sabemos de otros circuitos urbanos y luego darle un empujón el fin de semana".