Si el ruido de los nuevos monoplazas de la temporada 2014 dan pie a numerosas críticas, los decibelios este año corren a cargo del equipo Toro Rosso. La escudería liderada por Franz Tost empezó hace meses los trabajos de ampliación de su sede oficial, situada en la ciudad italiana de Faenza.
La nueva construcción, que contará con 7.500 metros cuadrados una vez terminada y que se bautizará como STR4, estará terminada aproximadamente dentro de un año. La última fase de trabajo será la demolición de la antigua fábrica, la actual STR3, que se encuentra justo al lado de la nueva, con el objetivo de ganar espacio.
Electricidad producida 'en casa'
Esta nueva fábrica acogerá casi todos los departamentos de la escudería italiana: el diseño, la investigación y el desarrollo, la informática, el taller de trabajo, el montaje de los coches e incluso las relaciones públicas. Además, una parte de la electricidad de este edificio se producirá in situ, gracias a un co-generador de metano. Un poco a imagen y semejanza de la F1 de 2014, que juega a ser híbrida.