El equipo Mercedes ha movido ficha para aclarar la intensa batalla que tuvieron Nico Rosberg y Lewis Hamilton en Hungría a puerta cerrada. "Respuesta corporativa", respondió Toto Wolff con una sonrisa este domingo cuando vio venir la polémica en Hungría. En carrera, después de que dos fallos en el coche echaran por tierra sus opciones en las dos últimas sesiones de clasificación, el equipo pidió varias veces a Hamilton que dejara pasar a su compañero porque iban con estrategias diferentes. Evidentemente, Niki Lauda, presidente del equipo, catalogó como "basura" las teorías conspiratorias que indican que los de Brackley quieren que el piloto alemán prevalezca por delante del británico.
De hecho, el motivo más sensato para las órdenes de equipo que hubo el domingo es que Mercedes había elegido al momento una nueva estrategia ganadora para Rosberg, después de que el momento en el que salió el primer coche de seguridad le dejara por detrás de Hamilton, que empezó la carrera desde el pitlane. Incluso Wolff tuvo que admitir que, si Hamilton hubiera obedecido las órdenes, "Nico podría haber ganado la carrera; ahora es una situación complicada".
El equipo se encuentra en una situación delicada al tener que escoger entre dejar a sus pilotos que peleen libremente por el Mundial o manejar bien las situaciones como la de este domingo, cuando ninguno de los coches plateados cruzó la meta en la primera o segunda posición. El comportamiento de Hamilton, quizás, le costó a Mercedes la victoria en Hungría, pero al menos le ayudó a reducir la distancia de puntos que tiene con Rosberg en el Mundial, a falta de ocho Grandes Premios.
Hamilton se quedó sorprendido por el mensaje
El Campeón de 2008 comentó de forma inmediata que, después de bajarse del W05 este domingo, cree que su jefe realizó las órdenes de equipo "por los motivos adecuados". No obstante, la intensa batalla codo con codo por el título es diferente. "Estaba en la misma carrera que él, así que me quedé muy, muy sorprendido de que el equipo me pidiera eso, que le dejara pasar. Fue un poco extraño", comentó Hamilton. El inglés, además, reveló el domingo que, tras el incendio que tuvo en el coche el sábado en clasificación, trató de calmarse con una pizza, algo de chocolate y unas bromas con Niki Lauda.
Precisamente, el presidente no ejecutivo de Mercedes ha señalado que Hamilton hizo lo correcto al ignorar las órdenes del equipo. "Habría hecho exactamente lo mismo. El equipo estuvo bajo mucho estrés, porque la carrera fue muy complicada, de eso no hay duda. El mensaje fue innecesario, pero se realizó", indicó el austriaco. Incluso Wolff ha admitido que Mercedes ncesitará emplear el parón veraniego de tres semanas para tramar una mejor estrategia para lidiar con la intensa batalla por el título entre sus dos pilotos. "Lo que tuvimos al comienzo de la temporada ya no funciona. Quizás, necesitamos tener una nueva forma. Se está intensificando todo y hemos de sentarnos y hablar sobre cómo manejar las cosas".