Un grupo de 40 antiguos trabajadores de Caterham están preparados para tomar medidas legales contra la escudería de Leafield. El equipo arrancó la temporada con serias dudas sobre su futuro, ya que Tony Fernandes, propietario en aquel momento, indicó que si el equipo no lograba resurgir este año cabía la posibilidad de abandonar el deporte. Así pues, hace unas semanas, el empresario malasio confirmaba la venta del equipo a un consorcio de Suiza y de Oriente Medio, que ya ha tomado las riendas de Caterham y ha realizado los cambios que ha creído convenientes.
Comunicado:
"Los trabajadores despedidos de Caterham están a punto de comenzar unas medidas legales contra el equipo. Se ha dado cita a los abogados para que representen a un grupo que se cree que alcanza la cifra de 40 personas. Un portavoz del grupo ha confirmado que el informe de despido de los trabajadores de Caterham se realizó sin previo aviso ni consulta, y tendrá como consecuencia quejas compensatorias contra la escudería.
Caterham también ha incumplido la promesa de que los trabajadores, al menos, recibirían su salario en julio. Los abogados del grupo tomarán acción de forma inmediata. Se entiende que los empleados, muchos de los cuales han apoyado al equipo durante sus cuatro años en el Mundial, pedirán a la FIA, como organismo regulador responsable, que investigue totalmente la conducta del equipo y las circunstancias en relación a su reciente cambio de propietarios".