Kimi Raikkonen sigue sin querer renunciar al campeonato. Aunque tiene claro que es tan difícil que ya no depende de sí mismo, parece no querer ser el gregario de Massa e intenta poner sus posibilidades de ganar el campeonato como escusa. Para él, su objetivo es ganar por encima de cualquier otra cosa.
"Lo más importante es volver a ganar. La situación en el campeonato es la que es y no depende de mis resultados, sino de los resultados de los demás. Teóricamente no se me ha escapado aún, pero ya no lo tengo bajo control. El año pasado, en la segunda parte de la temporada, tuvimos un gran coche y pude ganar varias carreras. Este año ha sido mas difícil. Sobre todo pensando en la temperatura de los neumáticos".