Alain Prost dio al equipo Mercedes unos consejos cruciales esta temporada para ayudar a evitar que se repitiera los problemas que él mismo protagonizó junto a Ayrton Senna en McLaren a finales de los años ochenta. La tensión entre Lewis Hamilton y Nico Rosberg en 2014 ha sido más que evidente, una tensión que comenzó a hacerse patente en Mónaco, donde el inglés acusó al alemán de fastidiar de forma deliberada su vuelta final en clasificación. La tensión entre ambos llegó a su punto álgido en Spa, donde ambos se tocaron en la segunda vuelta del Gran Premio.
Toto Wolff, el jefe ejecutivo de Mercedes, fue quien especialmente se encargó de manejar toda la situación, y esta semana ha confirmado a la publicación italiana Autosprint que siguió los consejos de Prost. "Has de aprender de los errores del pasado. Hablé un poco con Niki Lauda cuando fichamos a Hamilton y a Rosberg. Luego, al comienzo de la temporada, estuve hablando con Prost y le pedí su opinión sobre lo que debería de hacer para no tener la misma guerra que él tuvo con Ayrton. Entonces, pronunció la palabra mágica: transparencia".
"Me dijo que en su momento, McLaren no actuó de forma transparente con los pilotos, quizás porque Senna fue el último en llegar, por lo que era el novato. Prost comentó que, al final, no pudo comprender cómo estaba organizado el equipo, ya que los desacuerdos y rivalidades entre los pilotos se esparcieron entre los mecánicos; el equipo estuvo dividido en dos. Así que Alain me dio un consejo muy preciso y me dijo que no hiciera lo mismo. Dijo: 'Dile a todo el mundo exactamente las mismas cosas; no tengas favoritos. Es la única forma de contener la rivalidad'. Y eso hice. Fue una de las lecciones más importantes que he aprendido sobre cómo convertirse en un buen jefe de equipo", añadió.