Este viernes 1 de mayo de 2015 se celebra el 21º aniversario de la trágica muerte de Ayrton Senna, que perdió la vida en el Gran Premio de San Marino de 1994, celebrado en el circuito de Imola. El brasileño, que cautivó tanto a su país natal como a un gran grupo de aficionados al motor de todo el mundo, consiguió ganar tres títulos mundiales: en 1988, 1990 y 1991. Además, sus continuas batallas en pista con Alain Prost se han ganado el prestigio de aficionados y entendidos y se han convertido en parte de las mejores de la historia de la F1.
Senna debutó en la categoría con el equipo Toleman en 1984, aunque no pasaría mucho tiempo antes de que anunciara su llegada de la mejor forma posible. Su conducción en mojado durante el Gran Premio de Mónaco de ese mismo año se ha convertido en leyenda, y la carrera terminó con bandera roja justo cuando Senna adelantó a Prost en la recta final.
Después de su magnífico comienzo, el brasileño decidió fichar por Lotus al final de esa temporada, equipo con el que firmó la primera de sus seis victorias entre 1985 y 1987. Tras este año, Senna acabó en el tercer puesto del Mundial de Pilotos, algo que llamó la atención de uno de los grandes, McLaren. Su temporada debut con los de Woking aspiraba a transformarse en título mundial, pero no sería hasta el año próximo cuando se produjera uno de los finales de temporada más memorables de la historia.
Saltan chispas
En el Gran Premio de Japón, que albergó el trazado de Suzuka, Prost lideraba la carrera por delante de Senna, pero en la última chicane, Senna adelantó a su compañero de equipo por el interior. Desafortunadamente, ambos pilotos se tocaron, lo que ocasionó el abandono ipso facto del francés. Por su parte, Senna, con algo de ayuda de los comisarios, pudo reemprender la marcha con su McLaren y volver a pista. La FIA, más tarde, decidió descalificar al brasileño por no haber regresado al circuito desde el punto en el que se salió y, por tanto, Prost fue el Campeón Mundial de 1987.
El año siguiente, se volvió a dar la misma situción en la misma carrera, pero esta vez, si ambos no terminaban el evento, Senna sería coronado como campeón. Tras conseguir la pole, el brasileño no comenzó bien la carrera y se quedó por la zona sucia del circuito. Pero, al ver que Prost tuvo una mejor salida, Senna no quiso perder la ocasión de intentar adelantarle y, de nuevo, ambos acabaron fuera de pista, aunquefue Senna quien obtuvo el título mundial. Aunque muchos piensan que este segundo Mundial no fue merecido, el tercero fue incuestionable, ya que Senna sumó siete victorias, que le ayudaron a acumular ese año 96 puntos.
Fin del dominio McLaren
El equipo McLaren fue incapaz de mantener su dominio, y el resurgir de Williams hizo ue Senna tuviera problemas para mantenerse delante. En 1994, piloto ya de Williams, el brasileño ya sumaba dos abandonos en las primeras dos carreras cuando llegó el Gran Premio de San Marino. El fin de semana no empezó bien, ya que Rubens Barrichello lograba esquivar la muerte tras un fuerte accidente durante los entrenamientos. No obstante, Roland Ratzenburger no tuvo la misma suerte y perdió la vida durante la sesión de clasificación de ese mismo fin de semana. El accidente, que tuvo lugar el 30 de abril de 1994, hizo que Senna rompiera en lágrimas y que se cuestionara su futuro en el deporte.
Pero Senna decidió correr el domingo y, tras una buena salida, marcada por el accidente entre J.J. Lehto y Pedro Lamy, el brasileño se puso al frente de la carrera. En la séptima vuelta, de forma inexplicable, su coche se salió de pista en la curva Tamburello y se estrelló contra el muro, lo que provocó la salida de la bandera roja. A pesar de los intentos del equipo médico y del doctor Watkins, Senna murió más tarde en el hospital, y su muerte originó la creación de una leyenda que todavía sigue viva. El Instituto Ayrton Senna, dirigido por su hermana Viviane, sige ofreciendo educación y un futuro a millones de niños en Brasil.