Bernie Ecclestone ha negado los rumores que señalan que los cuatro grandes equipos estén planeando tomar el control de la F1. Tanto Bob Fernley como Monisha Kaltenborn, jefes de Force India y Sauber, respectivamente, han expresado sus preocupaciones en Autosport esta pasada semana en Montreal sobre lo que creen que está pasando: un juego de poderes tras el telón entre Mercedes, Ferrari, McLaren y Red Bull. Lo que se cree es que la idea de introducir los coches cliente forma parte de un programa más amplio para al final ganar "el control total desde un punto de vista económico y de poder", según Fernley.
El hecho de que los jefes de los cuatro grandes equipos se reunieran en el paddock del circuito Gilles Villeneuve el pasado viernes solo hizo que aumentar las sospechas, sobre todo porque Force India y Williams, miembros también del Grupo de Estrategia, no fueron invitados. "Esto ha sucedido ya en el pasado y no es algo nuevo, aunque sí lo es para ellos, porque son nuevos en esto, pero no lo es para mí. He estado ahí y lo he hecho antes. Hasta ahora, nadie ha amenazado con hacer nada, pero luego lo peor que alguien podría hacer es amenazarme", señala Ecclestone en Autosport.
No está preocupado
Dos semanas antes de la carrera en Mónaco, Ecclestone expresó sus opiniones sobre cómo podría funcionar el concepto del coche cliente, pero el jefe ejecutivo de la F1 se muestra escéptico. "Ellos creen que quieren eso, hasta que se planteen cómo hacerlo, y ahí es cuando llega el problema. ¿Cómo van a hacerlo? Si tienen un plan, entonces deberían llevarlo a cabo, pero no va a suceder, así que no pienso en ello ahora mismo. Hay muchas cosas que quiero hacer en la vida, pero no puedo hacerlas, y ellos tendrán que aprender eso cuando tengan los mismos problemas. Pero supongo que es bueno que tengan sueños y reuniones".
A pesar del exceso de reuniones por su cuenta en Montreal, Ecclestone cree que no se está haciendo muchos progresos, si es que hay alguno: "La sensación es que, probablemente, desperdiciamos 48 horas. El problema es que nadie sabe realmente lo que quiere, y cuando les das algo que creen que quieren, entonces luego deciden que no lo quieren. Pero no es un problema; haremos lo que creamos que debemos hacer, y espero que lo hagamos de la forma correcta, algo que ha sucedido más a menudo que lo contrario".