Felipe Massa ha indicado que la muerte de Jules Bianchi ha conseguido unir mucho más al grupo de pilotos actuales de la F1. La muerte del joven francés de 25 años fue la primera como consecuencia de un accidente durante un Gran Premio desde 1994, año en el que Ayrton Senna perdió la vida en la pista.
Massa estaba especialmente unido a Bianchi, ya que ambos compartían mánager, Nicolas Todt. "Después de algo como eso, los pilotos acaban siendo más cercanos, la relación se hace más fuerte. Fue un momento muy triste para el deporte en general debido a lo que le pasó a Jules", explica Massa en Globo.
"No fue un accidente normal, fue una colisión con una grúa; han cambiado muchas cosas desde entonces, como la introducción del coche de seguridad virtual. Pero no es solo eso: Jules era un gran amigo. Siempre nos veíamos, por lo que era una amistad diferente a lo que normalmente experimentan los pilotos. Fue muy triste y es, sin duda, otro motivo por el que la F1 ha de continuar luchando por la seguridad de los pilotos", añade.