Daniil Kvyat ha firmado el mejor crono de la segunda sesión de entranamientos libres del Gran Premio de Singapur. A los mandos de su Red Bull, el joven ruso ha sorprendido con su rendimiento y ha superado al resto de rivales al marcar un tiempo de 1:46.142. Por detrás, el primer Ferrari lograba un segundo puesto con Kimi Räikkönen, que se ha quedado a 39 milésimas del de Red Bull, mientras que Daniel Ricciardo ha firmado el tercer puesto, a algo más de una décima de su compañero.
La segunda ronda de entrenamientos libres del Gran Premio de Singapur ha arrancado con un 81% de humedad y 43ºC en la pista. Con este calor, Daniil Kvyat ha sido el encargado de abrir fuego y ha salido a la pista a los mandos del Red Bull. De hecho, el ruso también era el primero en marcar un crono oficial en esta sesión: 1:49.307. No obstante, la acción normal en el circuito duraba poco, ya que Will Stevens provocaba una bandera roja al estrellar su monoplaza en el segundo sector.
Desde ese momento, quedó claro que la sesión en Singapur no iba a ser aburrida. Pocos instantes después de lo ocurrido con el piloto inglés, Carlos Sainz acaparaba la atención al sufrir un reventón en el neumático trasero izquierdo a su paso por uno de los pìanos. El español ha tenido que compeltar su vuelta con el compuesto dañado, lo que ha afectado al fondo plano del monoplaza. Como consecuencia, el equipo ha tenido que desmontar el fondo y analizar los daños.
Hasta ese punto, el equipo Manor seguía con ambos monoplazas en boxes: Stevens por culpa del accidente y Rossi debido al incidente que tuvo en los Libres 1. Sin embargo, el piloto estadounidense pudo salir a la pista a falta de 20 minutos para el final y sumar algunos kilómetros.
En lo que respecta a las tandas largas, por primera vez el equipo Red Bull ha estado por delante de Mercedes. Daniel Ricciardo ha firmado muy buenos tiempos, estables y mejores que los de las Flechas Plateadas. Es cierto que se desconocen las cargas de gasolina de ambos coches, pero en un circuito donde la potencia del motor no es tan importante y donde prima la eficacia del chasis, Red Bull puede dar un golpe de efecto.