Renault ha decidido ofrecer su última actualización de unidad de potencia tanto a Red Bull como a Toro Rosso para el Gran Premio de Estados Unidos que se disputará este fin de semana en Austin. No obstante, será finalmente cada equipo el que decida si montar esta nueva unidad de potencia, ya que ambos equipos tendrían que hacer frente a sanciones en la parrilla como resultado del cambio de motor.
"En Austin tendremos disponible nuestra nueva especificación de la unidad de potencia. Los principales cambios tienen que ver con el funcionamiento del motor de combustión interno, para ofrecer una mayor potencia y eficiencia. Sabemos que la introducción de la nueva unidad de potencia incurrirá en una penalización, por lo que la decisión final se hará en plena consulta con los equipos. En este momento de la temporada, obviamente, los puntos son cruciales, por lo que si las circunstancias lo permiten, vamos a usarlos en la pista", ha explicado el director de operaciones de Renault, Remi Taffin.
Siguen mejorando
En las últimas carreras, los problemas de fiabilidad de Renault han disminuido mientras que el rendimiento ha mejorado hasta el punto en el que el equipo Red Bull está considerando recomponer su relación con el fabricante francés y asegurarse un suministro de motores para su participación en la próxima temporada de Fórmula 1.
Independientemente de si la unidad de potencia actualizada se utiliza o no, Remi Taffin se muestra optimista en cuanto al rendimiento que potencialmente pueden alcanzar los monoplazas con motor Renault en el Circuito de las Américas. "Utilicemos una unidad de potencia u otra, estaremos yendo hacia adelante en Austin. En las últimas tres carreras, nuestra fiabilidad ha sido buena y el rendimiento ha sido más acorde al de nuestras expectativas. Nuestros dos equipos sólo necesitan un fin de semana limpio para mostrar el potencial de mejora de ambos paquetes", concluye el director de operaciones de Renault.