El equipo Ferrari decidió no suministrar a Red Bull con sus motores en 2016 porque habría sido peligroso para la competitividad de la Scuderia, tal y como apunta Sergio Marchionne, presidente de los de Maranello. Red Bull estuvo buscando fabricante después de que su acuerdo con Renault no acabara demasiado bien a finales de año, y el acuerdo que pensaba que tenía con Mercedes no llegó finalmente a buen puerto. Por su lado, Ferrari consideró la alianza antes de decidir no llevarla a cabo; además, McLaren vetó a Honda para no suministrar motores a Red Bull antes de que estos anunciaran que seguirían con Renault, aunque usando motores con el nombre de TAG Heuer.
Cuando se le pidió que explicara el razonamiento que había detrás de la decisión de Ferrari, Marchionne comentó que su prioridad era asegurar que su equipo estaba en la mejor posición posible para ganar, y suministrar motores a Red Bull habría arriesgado eso. "Tuvimos que lidiar con algunas incertidumbres de nuestra propia arquitectura, y tuvimos que construir la distancia tecnológica".
"Por ello, comprometerse a ofrecer una unidad equivalente a un equipo que cuenta con una habilidad técnica a la hora de diseñar el chasis para competir podría haber sido peligroso para la competitividad de Ferrari. Mi principal compromiso es apoyar y proteger a Ferrari; no estoy interesado en batir a Mercedes con Red Bull. Si alguien quiere usar el motor Ferrari para vencer a Mercedes no estoy interesado en ello. Quiero que Ferrari gane. Sabemos que las habilidades de Red Bull son buenas; nos destrozaron con Sebastian Vettel y con los títulos que ganaron", añade Marchionne.
Actualmente, Ferrari ofrece sus motores a Sauber y Manor Marussia, y el presidente de la Scuderia apuntó el pasado junio que la marca habría estado contenta de suministrar también a Red Bull. No obstante, el italiano dejó claro que no tendría sentido que Ferrari gastara millones desarrollando un motor para dárselo a Red Bull por una pequeña parte y, luego, perder contra ellos. "Si tenemos en cuenta la cantidad importante que Red Bull invierte en su chasis, ofrecerles un motor con un precio de desarrollo mucho mayor que el que pagan por él no sería justo en la pista. No estamos interesados en eso".