Mika Hakkinen, ex piloto de F1, cree que la categoría reina del automovilismo tiene que encargarse de dos temas si quiere detener la sangría de espectadores que viene sufriendo desde hace unos años. En primer lugar, el bicampeón del mundo señaló la dificultad de entender la F1: "Técnicamente es demasiado complicado. Las personas le gustan las cosas fáciles. Nuestras vidas son lo suficientemente complicadas".
"La F1 también tiene que usar las redes sociales para conectar con los fans. Los aficionados no quieren simplemente ver qué pasa, quieren sentir que están ahí", señaló el ex piloto de McLaren, que se retiró de la F1 después de la temporada 2001 con un total de 20 victorias.