Parece que Michael Schumacher ha encontrado el oficio que más le gusta: ser probador. Pero no un probador cualquiera de coches de Fórmula 1, sino de coches que pagarías por conducirlos, más concretamente el deportivo Ferrari 599 GTB, todo un lujo.
Así, es Michael Schumacher fue cazado en el circuito Nürburgring conduciendo un Ferrari 599 GTB, coche por el que muchos pagarían por conducir, pero que para Michael Schumacher es uno más e incluso una minucia comparado con la colección privada que posee Michael Schumacher.
La imagen hace plantearnos varias situaciones; más allá de acudir a los circuitos de Fórmula 1, ¿Michael Schumacher desempeña otras funciones en Ferrari como las de probador de sus nuevos deportivos? No lo podemos afirmar con seguridad, porque también cabe la posibilidad de que acudiese al circuito a modo de diversión únicamente, algo extraño en un piloto de su caché y cansado de conducir cómo estará a su edad.